INTRODUCCIÓN AL ZERO WASTE
Como alternativa de consumo sostenible
Hoy en día (y casi por unanimidad) sabemos que hay que hacer algo, que este sistema de consumo no es sostenible y que se generan demasiados residuos plásticos y desechos.
Hay también un gran desconocimiento sobre cómo funciona el reciclaje o qué cambios están a nuestro alcance, y también dudamos de la importancia de cualquier pequeño acto, tachándolo de insignificante.
Pero no, todo cambio cuenta.
En mi caso, un día estaba viendo un documental y ya en el minuto 19 me di cuenta que tenía a mi alcance la posibilidad (y el deber) de dar un paso adelante más allá de la pasividad consciente.
Este es el trailer de Océano de plástico:
Fue para mi la motivación definitiva para iniciarme en el Zero Waste
Pero ¿qué es el Zero Waste?
La definición oficial la da la ZWIA (organización internacional sin ánimo de lucro Zero Waste International Alliance) en el siguiente enlace: http://zwia.org/zero-waste-definition/
De donde extraigo el siguiente concepto:
Zero Waste es un objetivo ético para guiar a las personas a cambiar su estilo de vida y prácticas para conservar todos los recursos mediante la producción, el consumo, la reutilización y la recuperación responsable de productos, envases y materiales sin quemar y sin descargas a la tierra, el agua o el aire que amenacen al medio ambiente o la salud humana.
Pero para mí, Zero Waste significa generar el mínimo residuo posible.
Hablo en todo caso de residuo y no de basura, ya que son dos conceptos diferentes:
- Residuo: elemento que queda inservible después de su uso o consumo.
- Basura o resto: residuo que no puede ser reciclado o compostado, y por lo tanto va a ser incinerado o descargado en la tierra o en el agua.
Al descubrir este movimiento me di cuenta de dos cosas:
- El simple hecho de ser consciente ya te otorga mucho poder
- Generar residuo cero viviendo en sociedad es una utopía (y esta es quizás la parte más frustrante del proceso).
Pero hay gente que está muy cerca.
Conocer sus historias me inspiró a intentar acercarme progresivamente y de forma irrevocable a ese estilo de vida.
Hablo de Lauren Singer y Bea Johnson.
Ambas recorren el mundo explicando el movimiento Zero Waste empezando sus conferencias de la misma forma: mostrando un pequeño tarro de cristal donde guardan toda la basura generada durante años.
Aquí puedes ver lo que hay en el tarro de Lauren Singer, toda su basura generada en 4 años:
Y esta imagen me hizo explotar la cabeza.
Ellas se analizan y castigan portando en envases de vidrio todo residuo que no pudieron evitar, reusar, reciclar o compostar. Ambas guardan su basura en tarros transparentes porque no quieren esconder un problema global (como hacemos todos los demás). Nosotros al sacar la basura creemos que ya se va el problema, pero no, simplemente lo estamos cambiando de lugar.
Me di cuenta que debía ser más responsable con mi consumo y saber qué hacer con los residuos.
Lauren y Bea me inspiraron de tal manera que me pasé horas y horas profundizando en sus métodos, me inspiró el saber que si hay gente que consigue hacer tanto, sin duda yo puedo intentar generar la mínima huella posible.
Así que me puse a ello.
Lo primero fue establecer las prioridades y los pasos progresivos que iba seguir, conceptos sobre los que profundizaré en próximos posts:
- Tomar conciencia del consumo propio y de todo el residuo que genera una persona o familia.
- Rechazar lo que no sea imprescindible.
- Reciclar mejor.
- Cambiar los productos de único uso por alternativas reutilizables.
- Declarar la guerra a los productos sobreenvasados.
- Comprender las propias limitaciones personales y sociales. El objetivo es encontrar un equilibrio que haga el cambio perdure en el tiempo.
- Entender que los plásticos no son el único problema, pero son un problema importante.
- Intentar comprar productos sin empaquetados (consumo a granel o tiendas de segunda mano).
- Perseguir el objetivo de reciclar menos, porque con por tu consumo habrás generado menos residuos que reciclar.
Espero que este texto te haya ayudado a conocer este movimiento y a interesarte por qué alternativas puedes incorporar a tu vida para tratar de ser el mejor o la mejor zero waster que puedas.
Si es así agradecería que me lo dijeses en comentarios 🙂
Te delicito por tu toma de conciencia y por iniciar este proyecto para inspirar a otros a que cambien y racionalicen su forma de consumir.
¡Muchísimas gracias compañero! No sé ni para qué hago esto, pero siento la necesidad de ordenar mis propios pensamientos. Aquí quedan por si a alguien más le resultan útiles. Un abrazo!